Es posible que asocies los tratamientos de Ortodoncia con personas adolescentes y jóvenes que quieren mejorar el aspecto de su sonrisa. Aunque es uno de los motivos de más demanda entre nuestros pacientes, lo cierto es que los tratamientos de Ortodoncia engloban un campo muy amplio, siendo una especialidad en sí misma.
De hecho, gran parte de esta especialidad, se centra en el diagnóstico, prevención y tratamiento de las maloclusiones en edades tempranas. De igual manera, muchos casos de personas que necesitan tratamiento en la edad adulta, podrían haberse evitado si se hubiesen intervenido tiempo atrás.
Estos tratamientos en niños están dentro de lo que llamamos Ortodoncia Interceptiva, mientras que los tratamientos de Ortodoncia en adultos forman parte de la Ortodoncia Correctiva.
¿Por qué es tan importante la Ortodoncia Interceptiva y la Ortopedia Infantil?
Durante la infancia, los huesos del maxilar y la mandíbula se encuentran en pleno crecimiento y por tanto los dientes no están aún en su posición definitiva.
Resulta más fácil actuar sobre el crecimiento óseo cuando este no ha finalizado, y esto se consigue a través de fuerzas graduales que actuán sobre los dientes y huesos, con el objetivo de guiarlos a su posición correcta o modificar su tamaño y estructura.
Abordar este tipo de situaciones antes de que se haya completado el crecimiento, es esencial para evitar problemas del desarrollo más complejos en el futuro, que podrían incluso requerir una intervención quirúrgica a nivel hospitalario. Y es que tratar estos problemas en la edad adulta, requiere procedimientos más molestos, largos y caros, que muchas veces se podrían evitar con un adecuado tratamiento durante la niñez.
¿Cómo se guía el crecimiento?
A través de diferentes tipos de aparatos, tanto fijos como removibles. La mayoría de estos aparatos son placas de pequeño tamaño que se colocan en el interior de la boca, pero en otras ocasiones en las que hay un compromiso esquelético más avanzado, también puede ser necesario combinarlo con Ortopedia y aparatos extraorales.
Estos aparatos pueden resultar un poco molestos al principio, pero a medida que pasan los días, el niño se va adaptando y se acostumbra a llevarlos. Es importante recalcar que en estos tratamientos hay que extremar la limpieza, tanto del aparato como de los dientes, lo que implica llevar a cabo unos hábitos de higiene muy minuciosos.
En el caso de los niños pequeños, será fundamental la labor de los padres, tanto para supervisar esta parte, como en el mantenimiento de los aparatos y el cumplimiento de las revisiones correspondientes.
¿Cómo sé si mi hijo necesita Ortodoncia Interceptiva?
Aunque a primera vista puede parecer que el niño tiene los dientes alineados y que no presenta ningún problema, debe ser la Ortodoncista quien valore el caso para confirmar que el desarrollo se está produciendo dentro de la normalidad.
En caso de que se detecte una anomalía durante la revisión, será necesario hacer un estudio de Ortodoncia que nos permita decidir lo mejor para él, y si podría beneficiarse de este tipo de tratamiento. Este estudio consta de una serie de pruebas diagnósticas, con fotografías intraorales y extraorales, radiografías y telerradiografía lateral del cráneo, sobre las que se llevan a cabo una serie de mediciones.
¿Cuál es el mejor momento para venir a revisión?
La Ortodoncia Infantil está dirigida a niños entre seis y doce años, por lo que es importante que acudan al Ortodoncista a partir de esa edad; no es necesario esperar a que haya terminado con el recambio dentario, sino que lo ideal es que la revisión se haga durante el periodo de dentición mixta.
Llamamos dentición mixta a la etapa del recambio dentario en la que se encuentran presentes tanto los dientes temporales como los dientes definitivos, ya que estos últimos remplazan a los primeros. Este periodo comienza con la erupción de los primeros molares definitivos superiores e inferiores, los llamados molares de los seis años.
La erupción de estas piezas tiene gran importancia para el posterior desarrollo de la boca, ya que sirven de guía para la colocación del resto de las piezas definitivas que quedan por salir. Asimismo, lo ideal es que cuando se produzca la erupción de los segundos molares permanentes, que son los últimos dientes en salir, a excepción de las muelas del juicio, todos los dientes encajen correctamente.
Por suerte, los padres están cada vez más conciéncianos de este problema y traen a los niños a revisión a edades más tempranas. Otra consideración importante es que los niños que requieren Ortodoncia Interceptival suelen necesitar Ortodoncia Correctiva una vez alcanzada la etapa de madurez. Esto se debe a que el tratamiento de Ortodoncia se realiza antes de que salgan todos los dientes permanentes, por lo que puede haber cambios más adelante.
¿Se puede evitar la Ortodoncia Interceptiva?
El desarrollo óseo tiene un fuerte componente hereditario, por lo que a veces la tendencia a sufrir una maloclusión viene determinada genéticamente y su prevención es limitada. Otros problemas difíciles de evitar son la erupción prematura o tardía de los dientes temporales.
Sin embargo, otras veces se desarrollan como consecuencia de hábitos que, aunque parecen inofensivos, si se mantienen a lo largo del tiempo pueden ser perjudiciales. Entre ellos encontramos:
– Succión digital: chuparse el dedo, normalmente el pulgar, de manera persistente.
– Respiración oral: respirar por la boca en lugar de por la nariz
– Succión del chupete o biberón más allá de los dos años de edad.
¿Qué problemas corrige la Ortodoncia Interceptiva?
Es posible que algunos de estos hábitos pasen inadvertidos o sean difíciles de detectar a ojos de los padres. En ocasiones, lo que los padres perciben son ya las consecuencias de estos hábitos, con problemas ya instaurados como dificultad para morder, masticar o pronunciar ciertos sonidos.
A su vez, estas situaciones pueden ser indicativas de que el niño sufre mordida abierta, mordida cruzada, sobremordida, asimetrías faciales, clase II, clase III… Estos términos, que quizás son un poco técnicos, son las maloclusiones más comunes que detectamos en nuestra práctica diaria.
La Ortodoncia previene y trata problemas muy variados, como:
– Un maxilar más atrasado de lo debido respecto a su posición correcta.
– Una mandíbula más desarrollada de lo habitual, y que por lo tanto necesita que se frene su crecimiento.
También puede darse el escenario contrario:
– Una mandíbula más retraída de lo habitual, o que no se ha desarrollado lo suficiente y que necesita una estimulación en su crecimiento.
Otra situación común derivada de hábitos como la succión del pulgar, es tener el paladar muy estrecho, que puede expandirse mediante disyuntores para corregir lo que llamamos mordida cruzada.
¿Y si ya tiene todos los dientes definitivos, tiene solución?
Puede que, tras leer esta información, te hayas sentido identificado con alguno de estos casos, pero pienses que es demasiado tarde porque tu hijo ya ha finalizado el recambio dentario.
No te preocupes. Si esto ocurre, es decir, si ya tiene todos los dientes permanentes en la boca, también puede haber solución para su problema, pero esta vez de la mano de la Ortodoncia Correctiva. De hecho, es muy común empezar el tratamiento de Ortodoncia en la adolescencia.
Como siempre decimos, cada caso es único y necesita un estudio por parte de un especialista en la materia, por eso es recomendable que la Doctora Teresa Alvear, nuestra Odontopediatra y Ortodoncista, lleve a cabo una revisión.
En Clínica Artem Dental, trabajamos todas las técnicas de Ortodoncia que existen y te ofrecemos soluciones adaptadas a tus necesidades. Desde los aparatos funcionales de los que hemos hablado hoy, enfocados a los niños, hasta los aparatos fijos mediante brackets, metálicos o de zafiro, pasando por los discretos alineadores de Invisalign.
La elección del tipo de Ortodoncia se hará, en primer lugar, en función de los resultados que se quieran conseguir y los movimientos a realizar; pero también en función de los requerimientos del paciente, ya que difieren mucho en características en cuanto a estética, comodidad, precio…
Pide cita con nuestros especialistas y podremos asesorarte con más detalle.
¡Estaremos encantados de ayudarte!
